Por qué hacer tu propio pan en casa

Una panificadora puede parecerte un electrodoméstico innecesario pero… ¡nada más lejos de la realidad!

Las panificadoras son fáciles de usar, sólo requieren unos minutos de preparación y se pueden usar para crear resultados mágicos, sin necesidad de intervención humana.

Los ingredientes básicos de la harina, el agua y la levadura, además de otros ingredientes, se añaden al recipiente de la panificadora en un orden determinado (en algunas panificadoras también se puede elegir el tamaño de la barra y el color de la corteza). A continuación, sólo hay que pulsar el botón de inicio. Tampoco se limita a los simples panes blancos. Puedes hacer todo tipo de panes, desde pan de espárragos, tomate seco y aceitunas hasta pan de trigo con cerveza negra y manzana. Incluso puede hacer masas para platos como este centro de mesa de brioche relleno con camembert al horno. Algunos modelos disponen de ajustes para mermelada e incluso yogur.

¿Qué panificadora comprar?

El precio puede variar bastante, desde una panificadora compacta con un número limitado de programas hasta una máquina multifuncional de tamaño familiar: puedes pagar desde 60 libras hasta 250 libras. Sin embargo, hay que tener en cuenta que nuestras pruebas han demostrado que no es necesario gastar toda la pasta para conseguir un buen pan y que más funciones no equivalen necesariamente a una máquina mejor.

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Cómo elegir la mejor panificadora

El proceso de elaboración manual del pan tiene muchos aspectos positivos. Puede ser una experiencia culinaria terapéutica para muchos, y es una forma estupenda de experimentar y controlar lo que se incluye en el pan, especialmente si te preocupan los aditivos.

Pero, ¿y si le gusta el pan fresco pero tu apretada agenda le deja poco tiempo para los numerosos pasos de mezclar, amasar, dar forma, fermentar y hornear tu propio pan? En ese caso, una panificadora es para ti. Además, si compras una máquina con temporizador, el pan puede estar listo y esperándote por la mañana.

Las panificadoras con funciones personalizadas o de sólo amasado significan que si ya tienes un banco de recetas muy queridas o te gusta cómo suenan algunos de nuestros panes, como la focaccia, el pan de picnic de higos y jamón serrano, o los remolinos de queso y pesto, todos ellos se pueden hacer en una panificadora.

Qué hay que tener en cuenta al elegir una panificadora

• Función de temporizador: te permite levantarte o llegar a casa con un pan recién horneado.
• Memoria de recuperación: útil si en mitad del ciclo hay una pérdida de energía o la máquina se apaga accidentalmente, ya que la retomará donde la dejó, dentro de un tiempo razonable.
• Tamaño de la hogaza y color de la corteza: añade versatilidad y variedad al horneado.
• Programas sin gluten: para aquellos con restricciones dietéticas.
• Sólo masa: amplía el repertorio de la máquina con pastas caseras, masas de pizza, palitos franceses, o para hornear su pan en un horno convencional para obtener un aspecto más casero.
• Funciones no relacionadas con el pan: las funciones de yogur, masa madre y mermelada añaden aún más utilidad.
• Funciones adicionales: las ventanas de visualización, los dispensadores de levadura o de frutos secos y semillas por separado son prácticos pero no esenciales.

 

Consejos para utilizar una panificadora

Si nunca has utilizado una panificadora, o estás acostumbrado a modelos más antiguos, aquí tienes algunos consejos para conseguir una hogaza perfecta.

• Hacer pan es una ciencia exacta, así que mida con cuidado y siga atentamente las instrucciones de la máquina, añadiendo los ingredientes al recipiente en el orden correcto. Cada modelo de panificadora está cuidadosamente calibrada electrónicamente, por lo que añadir demasiado o poco de cualquier ingrediente, o añadirlos en el orden incorrecto, desviará la receta.
  Utilice la harina tal y como se indica en la receta; la harina de pan de fuerza no puede sustituirse por harina común.
• Mantén la levadura y la sal por separado. La receta debe indicar siempre el orden de los ingredientes, la sal estará antes, y la levadura normalmente al final (o desde su propio dispensador). Nunca añadas los dos juntos, ya que la sal matará la levadura y el pan no subirá.
• Coloca siempre el pan terminado en una rejilla para que se enfríe y así evitar que se empape.

El pan hecho a máquina no contiene ninguno de los aditivos, estabilizadores o conservantes que se utilizan en la producción comercial, por lo que no se conserva tanto como el comprado en la tienda. Para mantener el pan fresco, introdúzcalo en una bolsa de plástico grande y saque el aire, ciérrela bien y se conservará durante unos días, después de lo cual es ideal para tostar. También se congela bien una vez que se ha enfriado por completo.

 

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